Las conservas ecológicas tienen beneficios para ti pero también medioambientales y sociales:
Para ti:
Son alimentos naturales,
saludables y con todas sus propiedades nutritivas. En la producción de alimentos ecológicos no se emplean sustancias químicas de síntesis (pesticidas, fertilizantes) y en su elaboración no se utilizan ni organismos modificados genéticamente ni radiaciones ionizantes. Este particular método de elaboración garantiza que los alimentos conservan sus propiedades nutritivas y son de la mayor calidad.
Otra característica de la agricultura ecológica es que, al cultivar los alimentos en suelos equilibrados por fertilizantes naturales, los productos son más nutritivos ya que contienen unos niveles más altos de vitaminas –especialmente la C–, minerales esenciales –calcio, magnesio, hierro, cromo…–, antioxidantes –que ayudan a prevenir determinadas enfermedades como el cáncer–, hidratos de carbono y proteínas.
Por su sabor y diversidad
En encuestas realizadas a consumidores ecológicos españoles, como segundo motivo para su elección, después de que son saludables, se alega su mejor sabor. Los productos ecológicos además de ser sabrosos cubren una gama amplísima
Son de calidad certificada
Además de los controles oficiales que se efectúan a todos los alimentos, los productos ecológicos son objeto de una certificación adicional que garantiza la autenticidad de su origen ecológico. Entidades de certificación autorizadas y supervisadas por las administraciones autonómicas, inspeccionan cada año a todas las explotaciones e industrias agroalimentarias ecológicas. En los alimentos ecológicos la trazabilidad y autenticidad está garantizada.
Para el medioambiente:
De producción sostenible
La agricultura ecológica es un medio de producción agraria y ganadera sostenible, es decir perdurable, que hace un uso racional de los recursos naturales, agua, aire, suelo y no los compromete para generaciones futuras.
Evitan la contaminación y favorecen la biodiversidad
Los alimentos ecológicos, al prescindir de sustancias químicas de síntesis, evitan la contaminación del aire, suelo y agua que originan los fertilizantes solubles como los nitratos, o los pesticidas. Este entorno más limpio, unido a técnicas culturales más respetuosas, genera un aumento de la actividad biológica del suelo, de su fertilidad, evita la erosión y contribuye a aumentar biodiversidad asociada a los ecosistemas agrarios.
Sociales:
Contribuyen al desarrollo de las zonas rurales
Indirectamente, la práctica de la agricultura ecológica permite una diversificación de las producciones y el aumento del valor añadido del producto final. Además los análisis ponen de manifiesto que la agricultura ecológica requiere un mayor volumen de trabajo, por lo que genera empleo en las zonas rurales. Los alimentos ecológicos fomentan la sostenibilidad medioambiental y social.
Conclusión:
Los productos ecológicos, al ser elaborados de forma más artesanal y cuidadosa, recuperan los gustos originales y tienen mejor sabor. Debido a que las plantas sólo son regeneradas y fertilizadas orgánicamente, éstas crecen más sanas y se desarrollan de mejor forma, conservando el auténtico aroma, color y sabor.
Por ello, muchos consumidores prefieren alimentos ecológicos, ya que conservan el verdadero gusto de cada ingrediente y les permite recuperar el sabor tradicional de los alimentos. Además, los alimentos ecológicos se conservan mejor que los convencionales.
En definitiva, los productos ecológicos saben mejor y son más sabrosos que los alimentos convencionales; sólo hay que probarlos y comparar.